El televisor tiene un pasado histórico, más allá del que conocemos, para saber su historia hay que ir a los tiempos de Galileo Galilei y su telescopio.
Quién creó el televisor
Y es que el concepto de la “televisión” quiere decir “visión a distancia” como los telescopios de Galileo Galilei. En 1884 aparece el Disco de Paul Nipkow, un dispositivo de captación y reproducción de imágenes que significa un avance relevante en la creación de un medio.
En la televisión el cambio llegó con el iconoscopio de Vladimir Zworkyn y Philo Taylor Farnsworth, que dio lugar a una televisión totalmente electrónica con una tasa de refresco mayor, con mejor definición de imagen e iluminación propia.
Para 1910 el Disco de Nipkow se utilizaba en el desarrollo de los sistemas de televisión en los inicios del siglo XX. Pero en 1925 aparece un inventor escocés de nombre John Logie Baird, quien realiza la primera experiencia real utilizando dos discos, uno que emite y otro que recibe, estos unidos por un mismo eje para que su giro fuera sincrónico y separados por 2 mm.
Dos años después (1927) las primeras emisiones públicas de televisión las hizo la BBC en Inglaterra y en 1930 las hacía CBS y la NBC en Estados Unidos, en estos dos casos fueron usados sistemas mecánicos con transmisión de programas en horarios regular.
En 1936 comenzarían las emisiones programadas y en Estados Unidos se empezaron el 30 de abril de 1939, lo cual coincidió con la inauguración de la Exposición Universal de Nueva York. Sin embargo las emisiones fueron interrumpidas por la Segunda Guerra Mundial, retomándose inmediatamente terminara.
Origen del televisor electrónico
El televisor electrónico comenzó transmisiones regulares en 1937, en Francia y el Reino Unido. Eso llevó a que la industria televisiva se desarrollara rápidamente, lo que condujo a un incremento espontáneo de telespectadores. El televisor era de pantalla pequeña y costaban demasiado.
Las emisiones eran posibles por el desarrollo de los siguientes elementos en cada extremo de la cadena: el tubo de rayos catódicos y el iconoscopio.
Cómo funciona el televisor
La emisión de las imágenes consiste en una recomposición que debe realizarse en un perfecto sincronismo entre la deflexión de exploración y la de representación.
La exploración de una imagen se hace mediante una descomposición, de primero el fotograma, que se llaman “cuadros”, luego “líneas” y se lee cuadro por cuadro. Posteriormente se determina el número de cuadros necesarios para que se pueda recomponer la imagen que se mueve y el número de líneas para obtener una óptima calidad en la reproducción y percepción del color, en el televisor de color.
Para poder determinar lo anterior se hicieron muchos estudios empíricos y científicos sobre el ojo humano y su forma de percibir las imágenes. Esto conllevó a determinar que debían ser al menos 24 cuadros por segundo, luego por diversas razones se emplearon 25 y 30 cuadros por segundo y el número de líneas debía ser superior a las 300.
Esta señal de vídeo se compone por la propia información de la imagen correspondiente a cada línea, en el sistema PAL son 625 por cada cuadro y en el NTSC 525. Estas líneas se agrupan en dos grupos, líneas impares y pares de cada cuadro, a cada grupo de líneas se les denomina campo, donde el sistema PAL usa 25 cuadros por segundo y el NTSC usa 30.
A ello se le agrega el sincronismo, de cuadros y de líneas, esto se hace de manera vertical y horizontal. Al estar dividido el cuadro en dos campos tenemos por cada uno un sincronismo vertical que nos enseña el comienzo y tipo de campo, cuando empieza el campo impar y el par. Al inicio de cada línea se añade el pulso de sincronismo de línea u horizontal, y en la televisión a color se añade información sobre la sincronía del color.
Evolución histórica del televisor
El siglo XX fue el despunte de la televisión, todos los países tenían como bandera tecnológica la producción de los sistemas de televisión nacional y privados. En 1953 nace Eurovisión, asociada a varios países de Europa que tenían conectados sus sistemas de televisión mediante enlaces de microondas.
Luego se crea en 1960 Mundovisión, que comienzan a realizar enlaces con satélites geoestacionarios que cubrían todo el mundo. Al mismo tiempo se creaban aparatos que grababan señales de vídeo y audio, permitiendo que los programas pudieran ser grabados y emitidos posteriormente.
A finales de los años 50 fueron desarrollados los primeros magnetoscopios, salían las cámaras con ópticas intercambiables que daban vueltas en una torreta adelante de un tubo de imagen.
Esos avances, más los desarrollos de las máquinas necesarias para la mezcla y generación electrónica de otras fuentes, propulsaron hacia adelante la industria televisiva.
En los setentas se implementaron ópticas Zomm, se desarrollaron magnetoscopios más pequeños, se grababan noticias en el campo. Se crearon equipos de periodismo electrónico o ENG. Se comenzó a desarrollar equipos digitales de vídeo, surgen los efectos digitales y las paletas gráficas.
Cómo eran los primeros televisores
En 1928 se experimentó con la transmisión de imágenes a color. En 1940 el mexicano Guillermo González Camarena patentó en México y Estados Unidos, el Sistema Tricromático Secuencial de Campos. En 1948 Goldmark se basa en la idea de Baird y Camarena y desarrolla un sistema similar que se llamaba sistema secuencial de campos. La Columbia Broadcasting System lo adquirió para sus transmisiones.
Luego vino el trinoscopio que permitía la transmisión simultánea de las imágenes de cada color. Ocupaba tres veces más espectro radioeléctrico que las emisiones monocromáticas, además era incompatible y costoso.
Nace el concepto de la luminancia y la crominancia, la primera porta información sobre brillo, luz, imagen, lo que corresponde a blanco y negro, y la crominancia lleva la información de color.
La Radio Corporation of America (RCA) en 1950 crea un tubo de imagen que portaba tres cañones electrónicos. Estos eran capaces de impactar en pequeños puntos de fósforo de colores, que se llaman luminófonos, mediante una máscara llamada Shadow Mask o Trimask. Lo anterior permitía prescindir de los tubos trinoscópicos abultados. Los electrones de los haces al impactar con los luminóforos, dan una luz de color primario correspondiente que a través de la mezcla aditiva genera el color original.