La parafilia es un comportamiento sexual en el que la fuente de placer no proviene de copular, sino de alguna otra cosa o actividad, dicho lo anterior, a lo largo del tiempo se han desarrollado bastantes gustos diversos que proveen placer con prácticas sumamente extrañas en el mundo que te listamos a continuación y que no han sido ilustradas porque regularmente generan rechazo.
Agalmatofilia
Deseo sexual al ver una estatua, maniquí u otro objeto inanimado con forma humana.
Apotemnofilia
Deseo de amputarse una parte en buen estado del cuerpo.
Crushing
Parafilia en la que alguien siente placer de ver a una persona con pies grandes aplastar bichos o insectos con ellos.
Plushofilia
Exitación por los peluches o personas disfrazadas de peluche.
Dacrifilia
Exitación con las lágrimas o el llanto.
Hibristofilia
Atracción por los hombres malos, a extremos de desear a asesinos, ladrones y delincuentes.
Vorarefilia
El orgasmo y estimulación yace cuando se imagina que se va a ser devorado en vida y a comer a alguien entero, pudiendo llegar a estados en los que se alcanza la fase de digestión.
Dendrofilia
Interés sexual por las plantas.
Mucofilia
Atracción por las mucosidades del cuerpo, principalmente por las de la nariz.
Coprofilia
Una de las prácticas más extendidas es la exitación con heces, excremento u orines, que se riegan en el cuerpo y que pueden llegar a ser digeridas.
Homeovestismo
Es una debilidad por las personas que se visten de forma adecuada del mismo género. Es contrario al fetichismo travestista, en el que hay una exitación por vestir prendas del género opuesto.
Formicofilia
Conseguir la exitación colocándose hormigas, cucarachas y otros insectos en sus genitales.
Oculolingus
Exitación por lamer el globo ocular.
Macrofilia
Es una atracción por los gigantes.
Infantilismo parafílico o síndrome del bebé adulto
Conseguir la exitación poniéndose pañales y siendo arrullado como un bebé.
Lactofilia
Es la atracción por la leche materna.
Fornifilia
Transformar al amante en un mueble. Sí, en un mueble que van desde mesas, sillas y estanterías, llegando incluso a ponerles libros para aumentar el grado de placer.
Estas fueron las parafilias más raras, por eso no se menciona la zoofilia o la necrofilia que son las más comunes y que podrías preguntarte por qué no las pusimos. Algunas otras no necesariamente son atracciones sexuales, sino afición por alguna actividad determinada como la bibliofilia la afición a los libros o la rockfilia, afición al género rock, dos actividades placenteras.
Dicho lo anterior alguien con un gusto excesivo por las mascotas, podría ser zoofilico y alguien con gusto por la muerte necrofilo.