La HD 140283, conocida también como Matusalén, es una estrella situada a 190 años luz de la Tierra que, aparentemente, es más vieja que el universo mismo, una contradicción que al parecer los astrónomos han resuelto.
La edad del universo, desde el momento en que ocurrió el Big Bang hasta el presente, se estima en 13.77 mil millones de años, una cifra con un margen de incertidumbre de 37 millones de años y a la cual se ha llegado gracias a las mediciones obtenidas por la WMAP, una nave lanzada en 2001 con el propósito de medir las diferencias de temperatura en los remanentes de calor del Big Bang. Esta cifra, sin embargo, ha sido puesta en duda por la existencia de una estrella conocida informalmente como “Matusalén”, por ser la más vieja del universo conocido, más vieja incluso que el universo mismo, pues su edad podría ser de entre 14 y 15 mil millones de años.
Matusalén, catalogada con la denominación HD 140283, se encuentra a 190 años luz de la Tierra, en la constelación de Libra, y apenas en marzo de este año el telescopio espacial Hubble recabó algunos datos que podrían ayudar a solucionar la contradicción aparente entre su edad y la edad del cosmos. “Tal vez la cosmología está equivocada, los astrofísicos estén equivocados o la distancia de la estrella esté equivocada”, declaró en ese entonces Howard Bond, de la Universidad Estatal de Pennsylvania, “Así que tenemos que reajustar la distancia”.
Asimismo, la HD 140283 también tiene la particularidad de ser una estrella de rápido movimiento, una característica ya observada desde hace más de un siglo. Desde entonces se sabe que la estrella orbita la Vía Láctea dejando a su paso un halo, lo cual la distingue de otras y a su vez revela que se trata de una de las primeras en formarse en el universo, cuando este se componía sobre todo de elementos pesados forjados en el interior de astros como la HD 140283 por medio de un proceso conocido como nucleosíntesis. Una hipótesis reciente supone que dicha velocidad se debe al helio que se difunde en lo profundo del corazón de la estrella, dejando menos helio para la fusión nuclear.
Por otro lado, Matusalén también se distingue por tener una proporción de oxígeno/hierro más alta de lo previsto. Según Bond, este podría ser otro factor para reajustar su edad, pues las estrellas ricas en oxígeno tienen en común el haberse formado en una época en que el universo era abundante en este elemento.
“Si ponemos todos esos ingredientes juntos se tiene una edad de 14.5 mil millones de años, con una incertidumbre residual que hace a la edad de la estrella compatible con la edad del universo. Esta es la mejor estrella en el cielo para obtener cálculos precisos de edad en virtud de su cercanía y su brillo”, dice el científico. “Se estarán realizando más estudios sobre este astro para comprobar la veracidad de su edad y estar seguros que no se ve afectada por otras circunstancias que aún no entendemos, luego de esto podremos ver si realmente es más antigua que el universo mismo.”