Fue develada una escultura del diablo por el Templo Satánico en Detroit, Estados Unidos. Las protestas no se hicieron esperar.
Protestas ha generado la escultura del diablo en Detroit, Estados Unidos.
La estatua está hecha de bronce y mide 2.7 metros, representa a un hermafrodita alado, su nombre real es Baphomet. A los lados tiene a dos niños sonrientes que lo miran a la cara.
Costó $100 mil y tuvo a cientos de satanistas en su inauguración. Los miembros del Templo Satánico desean trasladar la pieza y ponerla frente al monumento de los Diez Mandamientos en el Capitolio de Oklahoma.
El culto por Baphomet empieza en el año 1100 y nace en la Inquisición con la tortura de los Caballeros Templarios. Historiadores creen que Baphomet es una derivación del nombre “Mahoma”, fundador del islam.
La imagen más conocida fue dibujada por el ocultista francés Eliphas Levi, en su libro “Transcendental Magic: It’s Doctrine and Ritual”. En sus brazos tiene escritas las palabras en latín “solve” (separar) y “coagula” (unir).
El dibujo de Levi inspiró la creación de la estatua del diablo en Detroit.
Es un símbolo para demandar las prohibiciones religiosas.
Lucien Greaves, cofundador del Templo Satánico, dice que la escultura busca contrastar los mandamientos cristianos que incluyen “prohibiciones inconstitucionales en contra de la libertad de expresión y el libre ejercicio de la religión”.
“Nuestra estatua servirá como faro llamando a la compasión y a la empatía entre las criaturas vivientes”, dice Greaves, quien explica que “contiene todos esos opuestos binarios – arriba y abajo, parte animal y parte humano, macho y hembra”.
En la parte de enfrente de la estatua aún falta por agregar una inscripción: “El espíritu de compasión, sabiduría y justicia debería prevalecer siempre sobre la palabra escrita o hablada”.
Además se grabará un mensaje de la obra de Lord Byron Cain: “Entonces, ¿quién es el demonio? El que no dejaría que viviera, o el que hubiera hecho que viviera para siempre, en la alegría y el poder del conocimiento?”.
