Desde que inició la internet, se ha convertido en la mayor arma “de dos filos” que ha conocido la humanidad. Es la principal, más completa y mayor fuente de información sobre cualquier tema que se te ocurra, y a la vez, es la mayor red de delitos que ha existido en toda la historia.
Si quieres aprender sobre ciencias, tecnología, cine, cultura, música, deportes, etcétera, lo único que debes hacer es escribir algunas palabras y dar clic, lo cual es maravilloso; desafortunadamente, para ver suicidios, homicidios en vivo, violaciones o pornografía infantil, entre otros crímenes, el proceso es exactamente el mismo.
Los pedófilos, o depredadores sexuales, han aprovechado el anonimato y las múltiples formas de evadir la ley que existen en la web para crear sus propios “Wikipedias”, sus propios buscadores, páginas en vivo, foros y tanta cosa más relacionada con este asqueroso crimen. Actualmente, autoridades de distintos países calculan que existen más de 20 MILLONES de sitios web dedicados a la pornografía infantil, y lo peor, es que hay millones más de usuarios que visitan estas páginas y son consumidores frecuentes de los productos sádicos que venden. Cabe resaltar que el 39% de las víctimas de este abuso son menores de 5 años de edad, y 19% son menores de 3 años de edad!.
Este documental muestra la historia de un depredador sexual que luego de ser condenado por la justicia, decidió intentar redimirse al informar a la policía canadiense sobre una extensa red de violadores, pedófilos y sitios web de este tipo. Esto es un llamado de atención para todos y muestra más de lo podrida y enferma que está nuestra especie animal.
